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viernes, 22 de abril de 2011

Goméz Pardó en Rorty y los problemas de una ética pragmática critica a Richard Rorty por proponer una moral débil, que según Gómez Pardó, no funciona, sobre todo en la educación. Según Pardó, ¿Cuál es el mayor defecto que contiene la doctrina de Rorty? ¿Por qué favorece él la posición moral de Charles Taylor?

Héctor Navedo Aponte

Rorty intenta abandonar la epistemología y pasar a un criterio pragmático para entender la ciencia y su progreso. Rorty es nominalista y los nominalistas psicológicos creen que los términos y ruidos adquieren significados cuando  nosotros los  procesamos mentalmente. Rorty va a llamar a todas estas cosas que tienen referencia, esencialismo. Sócrates se identificaba  con el esencialismo y presuponía que los términos tienen una esencia y tenemos que buscarla antes de debatir. La esencia es la definición universal que no va cambiar. De igual forma,  Rorty piensa que los términos tienen un contexto de uso, por lo tanto hay que hacer preguntas especificando el contexto. La manera que tu defines las cosas va a depender del contexto histórico.  Según él, hay que olvidarse de la objetividad de copiar las cosas como son para crear un mundo que podamos reinterpretas las cosas. En otras palabras decir o descubrir las cosas de una manera mejor determinado por la sociedad a base de la cultura.
Por otra parte, Rorty va a cambiar la moral clásica vertical (hombre o ser humano con Dios) por una horizontal. Rorty afirma que “hay un progreso moral en la medida en que podamos ya no servirnos para la moral de esas categorías abstractas, donde la moral se pretende deducir a partir de principios y acceder a la experiencia de solaridad referida al dolor y a la humillación de otros”.  Para Rorty, la moral es propia del sentimiento y no de la razón. La razón está motivada por la abstracción y lo universal. El sentimiento se dirige a algo particular, o a lo concreto, y al mismo tiempo, a una situación social. En resumen, lo que nos une  en la solaridad no es la razón, sino la creciente práctica extensiva ante el dolor ajeno dentro de condiciones contingentes.
De su lado, Goméz Pardó favorece la posición moral de Charles Taylor, un realista ético, que plantea que  los términos y palabras que usamos en el lenguaje moral tienen referencia.  La referencia es el objeto que denota la palabra. Charles Taylor coincide con Taylor en que los referentes morales tales como dignidad, honestidad entre otros tienen referentes. No obstante, el problema surge cuando convertimos los adjetivos en sustantivos. Por lo tanto si quieres que un sustantivo tenga un referente te tienes que ir por la vía de Platón, en el cual el crea dos mundos, el mundo abstracto que sería  el de las ideas y  el mundo concreto que sería de las cosas individuales. Accedemos a las cosas concretas a través de los sentidos, pero tenemos un sentido superior que se llama la razón y es a través de esta que podemos acceder a lo concreto. Pardó entiende que los sentimientos son la base de la moral, esto no es suficiente pues necesitamos los referentes para poder acceder a un nuevo lenguaje trascendental. Uno no tiene moral por sentimiento, para que exista la moral tiene que haber valores  y el sentido de obligación, de manera que si te vas en contra de tus obligaciones, vas a sentir un malestar y esto es indicio de que estas funcionando moralmente.